Anaconda

Author:   Horacio Quiroga
Publisher:   Linkgua
ISBN:  

9788498168808


Pages:   42
Publication Date:   01 January 2014
Format:   Paperback
Availability:   Out of print, replaced by POD   Availability explained
We will order this item for you from a manufatured on demand supplier.

Our Price $21.12 Quantity:  
Add to Cart

Share |

Anaconda


Add your own review!

Overview

Benavente was praised by Lope de Vega in his work Laurel de Apolo, by Juan Perez de Montalban in his work Para todos, and by Tirso de Molina in his work Cigarrales de Toledo. he had a great satirical genius and talent for fine observation that made of him a predecessor of the Costumbrismo of the nineteenth century. At the same time he was the first to write interludes in verse with sung parts, a custom that later was popularized. In 1645, the first anthology of his works was published, under the title of Jocoseria, approved by Velez de Guevara and that gathers fourty-eight pieces. It is believed that he wrote around the 900 brief dramatic pieces, including praises and comic ballads, the majority have been lost or have no assigned author. Los muertos vivos served as an argument against Francisco Bernardo de Quiros for his extreme beliefs. Benavente fue halagado por Lope de Vega en su Laurel de Apolo, por Juan Perez de Montalban en su Para todos y por Tirso de Molina en sus Cigarrales de Toledo. Tuvo un gran genio satirico y dotes de fino observador que hacen de el un predecesor del costumbrismo decimononico. Asimismo fue el primero en escribir entremeses en verso con partes cantadas, costumbre que luego se generalizo. En 1645 fue publicada la primera antologia de sus obras, bajo el titulo de Jocoseria, aprobada por Velez de Guevara y que recoge cuarenta y ocho piezas. Se cree que escribio alrededor de novecientas piezas dramaticas breves, incluyendo loas y jacaras, la mayoria se han perdido o no tienen asignadas autor. Los muertos vivos sirvieron de argumento a Francisco Bernardo de Quiros para su entremes del mismo titulo.

Full Product Details

Author:   Horacio Quiroga
Publisher:   Linkgua
Imprint:   Linkgua
Dimensions:   Width: 14.00cm , Height: 0.30cm , Length: 21.60cm
Weight:   0.077kg
ISBN:  

9788498168808


ISBN 10:   8498168805
Pages:   42
Publication Date:   01 January 2014
Audience:   General/trade ,  General
Format:   Paperback
Publisher's Status:   Active
Availability:   Out of print, replaced by POD   Availability explained
We will order this item for you from a manufatured on demand supplier.
Language:   Spanish

Table of Contents

Reviews

Author Information

Horacio Silvestre Quiroga Forteza (Salto, 31 de diciembre de 1878-Buenos Aires, 19 de febrero de 1937). Uruguay. Era hijo del viceconsul argentino en Salto quien descendia del caudillo riojano Facundo Quiroga. Desde pequeno vivio acontecimientos tragicos: a los tres meses de edad, su padre murio de un disparo accidental de su propia escopeta en su presencia. En 1891 su madre se volvio a casar --esta vez con Ascencio Barcos--, y Quiroga establecio profundos vinculos afectivos con este. Sin embargo, tras cinco anos de matrimonio, Barcos, que sufria una paralisis provocada por un derrame cerebral, se suicido. Mas tarde Quiroga termino en Montevideo la ensenanza secundaria. Adquirio formacion tecnica, en el Instituto Politecnico de Montevideo, y general en el Colegio Nacional. En 1898 se enamoro de Maria Esther Jurkovski, que inspiraria dos obras suyas: Las sacrificadas y Una estacion de amor. Por esos tiempos Quiroga comenzo a colaborar en el semanario Gil Blas y establecio amistad con el escritor argentino Leopoldo Lugones, que fue una de sus principales influencias. Hacia 1900 Quiroga se fue a Paris tras recibir la herencia de su padre. Al volver, fundo el Consistorio del Gay Saber, un laboratorio literario donde se ensayaron nuevas formas de expresion. Tras la aparicion de su primer libro (Los arrecifes de coral) murieron dos de sus hermanos victimas del tifus. Ese mismo ano su amigo Federico Ferrando, que habia recibido fuertes criticas del periodista German Papini, decidio retar a duelo a aquel. Quiroga se ofrecio para preparar el revolver que iba a ser utilizado en el duelo y mientras revisaba el arma se le escapo un disparo que mato a Federico. Abatido, Quiroga cruzo el Rio de la Plata en 1902 y fue a vivir con Maria, otra de sus hermanas. En 1903, acompano como fotografo a Lugones en una expedicion para investigar unas ruinas de las misiones jesuiticas. La vision de la jungla marcaria su vida, seis meses despues compro unos campos de algodon en el Chaco. El proyecto fracaso. Y, sin embargo, en 1906 decidio volver otra vez a la selva y comprar otra finca. Por entonces Quiroga se enamoro de una alumna suya --la adolescente Ana Maria Cires--;y le dedico su primera novela, titulada Historia de un amor turbio, se caso con ella y la llevo a vivir a la selva. En 1911 Ana Maria dio a luz asistida por Quiroga a su primera hija, Egle Quiroga, en su casa de la selva. Sin embargo, ella no se adaptaba a aquella vida y le pidio Quiroga que regresaran a Buenos Aires. Ante la negativa de este, Ana Maria se enveneno en 1915. Durante 1917, Quiroga vivio con sus hijos en un sotano de la avenida Canning, alternando su trabajo como diplomatico y la escritura de relatos publicados en revistas. La mayoria de estos fueron recogidos en libros, el primero de los cuales fue Cuentos de amor de locura y de muerte (sic, titulo sin coma), que tuvo gran exito de publico y de critica. Al ano siguiente aparecio Cuentos de la selva, coleccion de relatos infantiles protagonizados por animales y ambientados en la selva. Quiroga dedico este libro a sus hijos, que lo acompanaron durante ese periodo de pobreza. Hacia 1927, habia decidido criar y domesticar animales salvajes, mientras publicaba su nuevo libro de cuentos, Los desterrados. Se habia obsesionado con Maria Elena Bravo, adolescente companera de clase de su hija Egle, que cedio a sus reclamos. A partir de 1932 Quiroga vivio en Misiones con Maria Elena y su tercera hija. Por entonces le diagnosticaron hipertrofia de prostata. Agravada su dolencia, Quiroga viajo a Buenos Aires y alli descubrieron que tenia un cancer de prostata avanzado. Recluido en el hospital supo que en los sotanos vivia apartado un paciente con deformidades similares a las del Hombre Elefante. Quiroga exigio que el paciente --llamado Vicente Batistessa-- compartiese habitacion con el. El 19 de febrero de 1937 y en presencia de Batistessa, murio Horacio Quiroga tras beber un vaso de cianuro.

Tab Content 6

Author Website:  

Customer Reviews

Recent Reviews

No review item found!

Add your own review!

Countries Available

All regions
Latest Reading Guide

wl

Shopping Cart
Your cart is empty
Shopping cart
Mailing List